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11ago19


Minga y protección, el llamado de la guardia indígena


Rechazo y repudio fue lo que ocasionó en varios sectores del país el asesinato de Kevin Mestizo Coicué y Eugenio Tenorio, miembros de la guardia indígena, en hechos ocurridos en la mañana de este sábado el departamento del Cauca.

De acuerdo con los primeros reportes, los hechos se presentaron en la vía que une a los municipios de Toribío y Caloto, en momentos en que las víctimas se movilizaban en un bus escalera.

Si bien hasta el momento la cifra de los heridos aún no se conoce en su totalidad, el reporte preliminar da cuenta que Leonel Coicué, Sandra Milena Pacué, Edinson Eduardo Rivera y Julio Taquinás Pilcué resultaron lesionados producto del ataque.

El crimen que enlutó a dos familias dejó consternado al país y se ganó el rechazó del presidente Iván Duque, quien consideró que el homicidio es una consecuencia de las rentas ilícitas que genera el narcotráfico.

Por su parte, la Unidad para las Víctimas, por medio de un comunicado de prensa, envió un mensaje de solidaridad a las familias de las víctimas y hace un llamado a las autoridades competentes con el fin de que capture a los responsables de este hecho violento.

El Defensor del Pueblo, Carlos Alfonso Negret, también reprochó el crimen. "Lo más grave de todo es que es un enfrentamiento entre las disidencias de las Farc y la Guadia indígena. La Guardia hay que respetarla, los disidentes de las Farc no van manejar el departamento del Cauca, tienen que salir de este territorio porque lo que hay es una tragedia humanitaria derivada del narcotráfico".

La ONU por su parte, expresó su preocupación dado que considera que en esa zona del país debe existir una medida de protección por parte del Estado.

¿Minga indígena?

La intención de los pueblos nativos es realizar un recorrido en las zonas rurales de Caloto, Toribío, Jambaló y Corinto para expulsar, o si es del caso capturar, a los integrantes de los grupos armados que delinquen en esta zona del departamento.

"Guardia, guardia, fuerza, fuerza, por mi raza, por mi tierra", este coro del himno de la guardia indígena del Cauca que ahora retumba en cada rincón de esta zona del país, luego que las autoridades nativas convocaran a una minga urgente en Toez, Caloto, luego de la muerte de dos comuneros en un ataque armado registrado en la mañana de hoy.

Las tradicionales chivas, entonces, son preparadas para movilizar a los pueblos originarios hasta este punto del departamento para combatir entre todos al grupo armado que le declaró la guerra a su milenaria guardia, la misma que los protege a diario, pero que hoy es atacada sin consideración, a pesar de que sus armas son la palabra y un bastón de mando.

Y es que la situación lo amerita, entre ayer y hoy, los guardias padecieron múltiples hostigamientos armados cuando precisamente buscaban brindar seguridad a sus comunidades, pero son atacados desde la partes altas de esa cordillera central o incluso emboscados como si se trataran de un grupo armado.

"Nos dan un trato militar, pero aún así nuestra respuesta es la palabra y la autoridad que nos da la comunidad, no van a tomarse el territorio, no van acabar con nuestras tradiciones, acá hay un pueblo que lucha a muerte por su vida, y como dice el himno de nuestra guardia, por cada indio muerto, otros miles nacerán", dice Harold Secué, consejero de la Acín, al referirse al llamado de lucha declarado en las últimas horas.

Porque el ataque de hoy fue cruel y despiadado: una chiva y unas camionetas que movilizaban guardia entre Caloto y Toribío fue atacada con fusil y explosivos, luego hombres armados en motocicletas, interceptaron estos vehículos para continuar la agresión, sin importar que en los mismos permanecían niños y adultos mayores.

"Que tembladera que siento Dios...hágale, hágale muévanse rápido", gritaba una nativa de El Venadillo al resguardarse en una humilde casa cuando atacaban a los automotores. Al final, dos nativos muertos y ocho de ellos heridos, al ser alcanzados por esquirlas o disparos de fusil.

En cuestión de minutos, y en medio aún de los disparos, los demás guardias evacuaron a los heridos hacia el hospital La Niña María de Caloto, pero dos de ellos, Eugenio Tenorio Yosando y Kevin Ademir Mestizo Coicué, fallecieron en el camino.

"Compañeros necesitamos apoyo, nos mataron a dos guardias de San Francisco, necesitamos reunir de forma inmediata a toda la guardia, necesitamos a todos para hacer el ejercicio, para hacernos respetar", era el llamado de un nativo por los walkie-talkies de las autoridades, en medio del llanto y la desesperación.

Después, y en ambulancias, los heridos fueron remitidos a la clínica Valle del Lili de la ciudad de Cali, donde reciben los respectivos cuidados, mientras en esta zona norte del Cauca el miedo impera entre la población nativa y campesina.

Por eso la Feria del café, que se pensaba hacer el Toribío esta mañana, al final debió realizarse en Caloto. El gobernador del Cauca, Óscar Campo, inició este evento a toda marcha, con una breve intervención para luego salir fuertemente custodiado por el Ejército y la Policía. Mientras tanto, los guardias recorrían la zona para ubicar a los responsables del ataque.

"Cuatro asesinatos de nativos en las últimas semanas"

Las reacciones tras el ataque no se hicieron esperar, como el llamado que hizo Alberto Brunori, representante de la Oficina en Colombia de la Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, a proteger a las comunidades nasa del norte del Cauca, luego que en las últimas semanas cuatro nativos fueran asesinados en este punto del departamento.

"En lo que va de 2019 se ha recibido información sobre el homicidio de 36 integrantes del Pueblo Nasa del Norte del Cauca; sumados a aproximadamente 53 amenazas de muerte y 8 atentados. En comparación con el año anterior, agosto de 2018, hoy hay a la misma fecha 9 casos más de homicidios. Una situación decididamente alarmante", relata Alberto Brunori.

Luego vino la declaración del Defensor del Pueblo, Carlos Alfonso Negret, quien atribuyó el ataque a disidentes de la entonces guerrilla de las Farc, luego que adelantara una reunión de urgencia con los comandantes de la Policía y del Ejército de esta zona, en el municipio de Santander de Quilichao.

Después llegó el llamado a una minga urgente en Toez, Caloto, por parte de la Consejería Mayor del Cric y emitido por todas las emisoras nativas del departamento.

"Se cita a las 126 autoridades, a las once asociaciones y a toda la guardia indígena de cada territorio, comisión política, así como a todos los programas locales, zonales y regional, a junta directiva de carácter extraordinaria, para el día de mañana 11 de agosto, hora de llegada 8:00 de la mañana en Toez, Caloto", reza el comunicado, donde además instan a los comuneros a llevar alimentos y carpas para pasar el tiempo que requiera la actividad de control que adelantarán en este punto del departamento.

Heridos

  • Aurelio Noscué Julicué, de 59 años.
  • Yuli Alejandra Yatacue, de 16 años.
  • Julio Taquinas Pilcué, de 50 años.
  • Edinson Edgardo Rivera Noscué, de 7 de años.
  • Sandra Milena Pacué, de 41 años.
  • Leonel Coicué Julicué, de 55
  • Flor Alba Rivera, de 46 años.
  • Mario Baicué, de 53 años.
[Fuente: El Colombiano, Colprensa, 11ago19]

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