26mar03

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Integrantes del Batallón Manosalva Flores asesinan a un campesino en Yarumal, Lloró.

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La Comisión Vida, Justicia y Paz de la Diócesis de Quibdó, en solidaridad con las comunidades campesinas del Alto Atrato y del Andágueda, denuncia ante la opinión pública nacional e internacional los siguientes hechos:

El lunes 17 de marzo de 2003 en un lugar llamado "Peña Pelada", en el territorio de Calle Larga-Municipio de Lloró, tropas del Ejército Nacional pertenecientes al Batallón Manosalva Flores de Quibdó, dieron muerte al campesino Leonel Rentería Rentería de Yarumal-Lloró de 27 años.

Según la versión manifestada por la Fuerza Pública se trataba de un guerrillero y fue muerto en combate. Según los vecinos del lugar Leonel estaba trabajando en el monte en un lugar denominado Quebrada del Salado. En la mañana del lunes 17 de marzo, hacia las nueve, unos soldados del Batallón Manosalva Flores simularon un combate y lo mataron. Le vistieron con un uniforme de guerrillero y encargaron a un motorista que llevara el cadáver a Lloró. A raíz de estos hechos hay gran peligro de que se desplacen en masa las comunidades del río Tumutumbudó.

Es ya el segundo caso en menos de un mes que personas, que según el testimonio de su comunidad han sido civiles, son matadas por tropas del Batallón Manosalva Flores y presentadas como guerrilleros caídos en combate. El 24 de febrero del año en curso, en Guarato-Tadó, ellos dieron muerte a los indígenas Evelio Sanapí Sintua y Fernando Antibia, caso que fue denunciado el día siguiente en un comunicado público de la OREWA.

También los grupos guerrilleros siguen atentando contra la vida de civiles. El 29 de enero en la comunidad de Campo Bonito-Municipio de Quibdó guerrilleros del ELN, frente Cimarrón asesinaron a Benigno Sánchez Palacios y a Betty Hinestroza Martínez. El 1 de marzo en la comunidad de Tanguí-Municipio del Medio Atrato guerrilleros de las FARC, frente 57 asesinaron a Leonso Romaña Rodríguez. Estos hechos fueron denunciados en su respectivo momento por el Consejo Comunitario Mayor de la ACIA.

Ante esta situación gravemente preocupante, la Diócesis de Quibdó exige:

1) una investigación rigurosa y el más pronto esclarecimiento de estos hechos y, en caso de verificarse los montajes, el castigo de los culpables de esta violación de los Derechos Humanos.

2) el cese inmediato de asesinatos de civiles por parte de los actores armados.

3) el cese de restricciones económicas y de libre movimiento contra las comunidades ubicadas en territorios de control militar de grupos guerrilleros.

4) el cese de detenciones de personas honestas y trabajadoras, sin más fundamento que señalamientos arbitrarios, en muchos casos proferidos por personas con pésimos antecedentes.

Quibdó, 26 de marzo de 2003

Este documento ha sido publicado el 11abr03 por el Equipo Nizkor y Derechos Human Rights