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10ene18


ERC niega ahora que el pacto de Rovira con Puigdemont garantice la investidura del 'expresident'


El candidato de JuntsxCat a la Generalitat, Carles Puigdemont, y la secretaria general de ERC, Marta Rovira, han llegado a un acuerdo para iniciar la legislatura surgida de las elecciones del 21 de diciembre, que pasaría por reinvestir al expresidente de la Generalitat. Lo han dicho fuentes de la candidatura del expresidente mientras que ERC lo niega y asegura que el acuerdo es sólo para constituir el Parlament y elegir la Mesa, permitiendo así que arranque la legislatura.

'El Periodico' ha adelantado el desmentido de los republicanos, después de que todos los medios se hiciera eco el supuesto acuerdo para que Puigdemont sea restituido en la presidencia de la Generalitat. Lo cierto es que, haya o no acuerdo, lo que no está claro es la fórmula que se aplicaría para hacer posible una investidura a distancia, una vez constatado que el expresidente no tiene ninguna intención de regresar a España para afrontar sus responsabilidades con la justicia.

A Puigemont, le gustaría una investidura telemática o bien por delegación, esto es, haciendo que otra persona lea su discurso ante el pleno del Parlament. Ninguna de las dos vías está prevista en el reglamento que, aunque no las excluye de forma expresa, tampoco abre la puerta a una alternativa al debate tradicional, en el que el candidato a ser investido comparece presencialmente para defender su programa de Gobierno ante la Cámara.

La cuestión es que forzar una reforma exprés del reglamento para hacer un traje a medida de los deseos de Puigdemont, es visto por muchos como un atajo que obligaría a empezar la legislatura como acabó, con el tumultuoso pleno del 6 y el 7 de septiembre cuando la mayoría independentista se saltó todas las normas, el reglamento y el Estatut, para imponer su voluntad a la oposición sin escucharla siquiera. Es por eso que ERC no oculta esta vez sus reservas y por lo que no para de repetir que esta vez sí habrá que escuchar el dictamen de los letrados del Parlament.

De momento, Puigdemont y Rovira han cerrado el acuerdo para constituir la Mesa durante una cena celebrada este martes en Bruselas. El pacto supone que de los siete miembros que tiene ese órgano, dos sean para JxCat y dos para ERC, que se queda con la presidencia. De los tres restantes dos irían a parar al partido más votado en las elecciones del 21 de diciembre, Ciudadanos, uno al PSC y se quedarían fuera los Comunes, que solo hubieran podido entrar si el soberanismo les hubiera cedido uno de los puestos que le corresponden.

Queda en pie la incógnita de cómo se garantizaría que los diputados electos que permanezcan en Bruselas o en prisión y que no renuncien al acta puedan votar. En todo caso, se garantiza el arranque de la legislatura y se descarta la opción de que la mayoría independentista bloquee el pleno de constitución del Parlament no asistiendo para provocar que no haya quórum y abocando así a una nueva convocatoria electoral.

Cataluña y Córcega, una equiparación imposible

Puigdemont intervino este martes por videoconferencia en un acto sobre la situación en Cataluña celebrado en Montpellier y puso el ejemplo de Córcega para una negociación con el Gobierno central. Durante su intervención, que se ha podido seguir en directo a través de Facebook, Puigdemont señaló que el Gobierno central podía tomar nota de lo que ha hecho el Ejecutivo francés tras la amplia victoria de los nacionalistas en las elecciones regionales en Córcega, ya que, subrayó, ambas partes "han empezado a hablar".

Puigdemont hizo esta afirmación al ser preguntado por el moderador del acto, en el que han participado también representantes de ERC y la CUP, sobre si Francia podría ayudar a unas eventuales negociaciones entre el Gobierno central y el futuro Govern y qué esperaba del ejecutivo francés al respecto. "No puedo recomendar nada y tengo que respetar la independencia de las instituciones y de los gobiernos europeos", ha dicho el candidato de JuntsxCat.

Lo cierto es que, si bien los nacionalistas corsos arrasaron en las recientes elecciones celebradas en diciembre, su coalición es una mezcla de independentistas y autonomistas que sueñan con un grado de autogobierno como el que ha tenido hasta ahora Cataluña respecto a España. Y el presidente francés, Emmanuel Macron, ha sido una de las voces europeas que han acusado al independentismo catalán de "saltarse las reglas del Estado de Derecho", motivo por el que ha descartado una mediación entre el Gobierno regional y el central considerándola "inviable".

Puigdemont y el exvicepresidente catalán Oriol Junqueras presentaron este martes las credenciales en el Parlament como diputados de la próxima legislatura, a poco más de una semana de que se constituya la cámara, el 17 de enero. Además, el exconseller Carles Mundó renunció a su acta y anunció que abandona la política.

El día también estuvo marcado por la renuncia a la presidencia del PDeCAT del expresidente catalán Artur Mas, decisión que ha justificado por el calendario de causas judiciales y la necesidad de que su figura no "frene" la emergencia de nuevos liderazgos en la expansión del proyecto de Puigdemont.

[Fuente: República de las ideas, Agencias, Madrid, 10ene18]

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