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07dic07
Muchas diferencias y poca coincidencia en diálogo Rusia-OTAN
En una atmósfera en que los antagonismos solapan casi por completo a las avenencias, comienza hoy en Bruselas el Consejo Rusia-OTAN en el formato de ministros de Asuntos Exteriores.
Para el canciller ruso, Serguei Lavrov, y sus pares occidentales, constituye todo un reto acercar posiciones en medio de un clima que el vicepresidente de la Academia de Problemas Geopolíticos Leonid Ivashov califica de retorno a la guerra fría.
El teniente general (retirado) y ex jefe del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas rusas basa sus apreciaciones en contradicciones estratégicas de larga data a las que Moscú ha propuesto, infructuosamente, soluciones cooperadas.
Estas matrices del diferendo bilateral son la ampliación de la alianza atlántica, el acercamiento de sus fuerzas y medios a las fronteras de Rusia, así como el proyecto estadounidense de emplazar en Europa del Este elementos de su sistema de defensa antimisiles (DAM).
Otro tema peliagudo es la situación del Tratado de Fuerzas Armadas Convencionales en Europa, sobre el cual el Kremlin decretó una moratoria que entrará en vigor en la madrugada del próximo 13 de diciembre.
Lavrov, planteará a sus colegas la insatisfacción que causa a Moscú la idea estadounidense de emplazar 10 cohetes interceptores en Polonia y un centro de radiolocalización antimisiles en República Checa, sostuvo el portavoz de la cancillería Mijail Kamynin.
Nuestros expertos estiman que en un futuro previsible no existirán amenazas que justifiquen esa decisión, explicó el diplomático.
Las autoridades de Moscú están convencidas de que tal paso podría alterar de manera sustancial el equilibrio estratégico en el continente europeo y mermar la confianza que con tanta dificultad iba ganando terreno al final de la guerra fría, añadió.
Kamynin expresó, empero, que la Federación de Rusia está dispuesta a seguir cooperando con la OTAN, aunque aclaró que esta labor no resultará fácil.
Por su parte, el jefe del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas de Rusia, Yuri Baluyevski, confirmó que Moscú y Washington no han avanzado ni un ápice en las negociaciones sobre el problema del emplazamiento de la DAM en Europa.
No oí nada nuevo en relación con las pláticas de octubre, dijo el general de Ejército en viaje de trabajo esta semana a Estados Unidos, donde insistió en que se deben determinar las amenazas reales, y solo después desplegar esos medios de carácter estratégico.
La última proposición del Kremlin sugiere integrar los sistemas de defensa antimisiles de Rusia, Estados Unidos y la OTAN con igual acceso para todos los participantes.
El presidente, Vladimir Putin, insiste en que el Pentágono debe renunciar a su proyecto antimisiles en Europa del Este, y como alternativa plantea esta nueva iniciativa, la cual debe basarse en el estudio conjunto de las posibles amenazas coheteriles.
Pero la respuesta escrita norteamericana no habla de la evaluación conjunta de tales peligros, ni asegura la presencia rusa en las instalaciones de la DAM estadounidense en Europa.
Tampoco confirma la voluntad de desactivar el sistema en caso de que no existan peligros reales.
En relación con el Tratado de Fuerzas Armadas Convencionales en Europa (FACE), Putin aseguró que la Federación rusa regresará a él si otros países signatarios lo ratifican y cumplen plenamente sus obligaciones.
No vamos a esperar hasta el infinito, advirtió al referirse a la ley de suspensión de su vigencia, publicada por la Gaceta Rusa el 3 de diciembre de 2007, con lo cual entró en vigor.
El documento aclara que la moratoria comenzará a regir en la medianoche del 12 al 13 del mes corriente.
Al referirse a esta suspensión temporal, Lavrov sostuvo que pese a imponer una moratoria, Rusia está dispuesta a buscar acuerdos con el fin de mantener la estabilidad política-militar.
El canciller recordó que la desintegración del campo socialista y de la Unión Soviética creó una nueva situación cualitativa y se hizo necesaria una variante renovada del documento rubricado en 1990, el cual se aprobó en 1999, en Estambul.
Sin embargo, hasta el presente, el texto adaptado solo ha sido ratificado por Rusia, Belarús, Ucrania y Kazajstán, enfatizó.
En estas circunstancias, expertos como Baluyevski, señalan que en el control de la cantidad de tanques en los arsenales de una y otra parte, la ventaja es de 12 contra uno a favor de la alianza occidental.
Tal escenario signado por los antagonismos, enfrenta hoy con cara de no muy buenos amigos a los jefes de la diplomacia del Kremlin y la OTAN en Bruselas.
[Fuente: Jorge Petinaud Martínez, Prensa Latina, Moscú, 07dic07]
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