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24jun05


Ordenan la detención de trece agentes de la CIA.


La policía de Milán busca a trece agentes de la CIA por secuestro agravado de personas. Según la acusación, han organizado y llevado a cabo el secuestro del imán egipcio Abu Omar (en el Registro de Nacimiento Nasrosama Mustafa Hassan) secuestrado en Milán el 17 de febrero de 2003 y transferido en avión a Egipto, donde fue torturado atrozmente. Entre los agentes incluidos en la orden de arresto se encuentra también el jefe de la Estación de la CIA en Milán, quien en 2003 fue acreditado como diplomático —« Cónsul de los Estados Unidos en Italia » — y que, hace unos meses, fue sustituido de repente. Del Comando americano de agentes secretos, que desde ayer por la mañana están siendo formalmente buscados, forman parte también tres mujeres: « Cynthia » y una amiga hispanoamericana habrían hecho de relevo, mientras « Mónica » controlaba en el auto las vías de acceso.

La Estrategia.

La cúspide de la CIA ha afirmado, en las audiencias públicas después del 11 de septiembre, haber efectuado otras 70 operaciones de « rendición extraordinaria » de presuntos terroristas, capturados en el exterior al estilo de los 007 americanos y transferidos secretamente a los países de origen - pero siempre han negado complicidad en la violencia ejercida contra esta categoría especial de detenidos. Las organizaciones más importantes de derechos humanos acusan sin embargo a la administración Bush de legitimar de esta manera un sistema de « Tortura por comisión », dejando el resto a los Estados Árabes aliados, como Egipto, para no ensuciarse las manos. Ahora, por primera vez, los Magistrados de Milán dicen tener pruebas documentales de que esta estrategia de arrestos ilegales ha sido aplicada también en Italia. De los 13 agentes de los cuales la policía (Digos) ha descubierto nombres de tapadera, teléfonos, fotos, pasaportes, tarjetas de crédito y direcciones estadounidenses declaradas en los hoteles milaneses donde todos pasaron la noche, divididos en grupos, la semana del secuestro.

Los hoteles de la CIA.

El secuestro del imán de Milán costó caro: los agentes de la CIA pagaron más de 120 mil euros sólo por dormir en el hotel más lujoso de Milán, como documentan las indagaciones. Todos hoteles de 5 estrellas como el Hilton, Sheraton, Gallia y el Pr&iacuete;ncipe de Savoia. El 19 de febrero, mientras para Abu Omar comenzaban las torturas en la cárcel de los servicios egipcios, los jefes del comando americano se encontraron en Venecia, en el Hotel Westin Europa, para hacer el balance y festejar el éxito de la "rendición" desde Milán a Egipto. Antes de desaparecer de Italia, dos parejas de agentes de la CIA se concedieron además unas vacaciones en hoteles románticos en Valmalenco y en el Golfo de los Poetas.

El Error.

El traicionar la CIA fue una extraña ingenuidad: los agentes americanos usaron teléfonos italianos para comunicarse entre ellos en la fecha, e, inclusive, en los minutos exactos en que se llevaba a cabo el secuestro. Los policías de la Digos, los mismos que investigaban desde el 2002 a Abu Omar por terrorismo internacional, pudieron aislar de esta manera un total de 17 celulares que en el día del rapto, entre las 12:28 y las 12:33, estaban todos activos en la calle Guerzoni, donde Abu Omar fue secuestrado mientras caminaba desde su casa a la cercana Mezquita de la Avenida Jenner. Una testigo ocular presenció el rapto: una mujer egipcia que vió dos hombres italianos disfrazados de policías para bloquear a Abu Omar, que « pedía ayuda en Aacute;rabe » mientras era «introducido a la fuerza en un furgón blanco sin cristales posteriores ». La investigación ha adelantado que, inmediatamente después del secuestro, el celular del presunto Jefe del Comando marcó un número reservado del Consulado de los Estados Unidos en Milán, y al celular personal de Bob, es decir el mismo Jefe-Centro Cia. Un segundo grupo de agentes americanos, como demuestra el análisis de los « celulares radiobase » (las antenas de la Telecom y la WIND) poco a poco conectadas de 9 teléfonos, se ha encargado después del transporte del rehén, en un furgón y dos automóviles de cobertura alquilados en Milán, hasta la base militar USA de Aviano. La Digos descubrieron además tres tarjetas Viacard usadas por los tres vehículos para pagar el peaje, con ingreso desde Milán-Cormano y salida a las 16:00 en punto desde la caseta de Portogruaro.

Desde Aviano a El Cairo.

A las 16:13 y a las 16:32 el celular del Jefe del Comando llamó al número reservado de un Coronel de la base aeronáutica USA, según la acusación, para avisar de la llegada y evitar controles de los militares italianos. A las 18:20 un avión de cobertura de la CIA (un Learjet con sigla militar «Spar 92» que significa «Personaje no identificable a bordo») despegó de Aviano hacia Ramstein, la base USA en Alemania, que es también donde el comando europeo de la CIA tiene su sede. Desde aquí, a las 20:31, un segundo jet ejecutivo (código N85VM), partió hacia El Cairo: un Gulfstream privado a nombre del equipo de Baseball de Boston, los «Red Sox», cuyo propietario efectivamente ha confirmado al Chicago Tribune haberlo alquilado a la CIA. A las 12:30 pm, el Jefe del Comando llamó desde Italia a un número reservado en Virginia, el Estado donde la CIA tiene su sede. Misión cumplida. Al día siguiente, el 18 de febrero de 2003, Abu Omar ya estaba prisionero en la cárcel egipcia de Al Tora, donde dan comienzo los interrogatorios y las torturas. La Procuraduría de Milán solicitó información en dos ocasiones sobre la suerte del imán, pero Egipto no ha respondido nunca.

Los Misterios.

Todos los teléfonos usados por los secuestradores son irregulares, porque estaban registrados bajo nombres falsos, sociedades inexistentes e, inclusive, de ciudadanos milaneses inocentes, hasta de un albañil ignorante romeno. Los agentes de la CIA sin embargo han tenido que mostrar sus pasaportes estadounidenses (con las fotos) para registrase en 23 hoteles y en 4 establecimientos de alquiler de autos. Y la Digos ha podido secuestrar las fotocopias de los documentos, que resultaron ser auténticos. Seguramente la identidad de «Bob» es verdadera, conocido por la misma Digos como el Jefe-Centro Cia. La jueza Chiara Nobili ha ordenado el arresto sólo de los agentes que resultan con «graves» indicios de culpabilidad. La indagación sin embargo de los procuradores adjuntos Armando Spartaro y Ferdinando Enrico Pomarici es mucho más amplia e involucra, al menos, otros seis agentes que habrían participado en las investigaciones preparatorias espiando al imán hasta el día 10 de febrero. Pero aún quedan muchas preguntas por responder: ¿es posible que la CIA haya llevado a cabo el secuestro de una persona sin advertir al aliado Gobierno italiano ? ¿Y quiénes eran los dos disfrazados de policía que «hablando italiano» bloquearon a Abu Omar?

Fuente: Paolo Biondani en el diario Corriere della Sera, 24Jun05. Traducción al español de la versión original en italiano realizada por el Equipo Nizkor el 29jul05.

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