El Procurador de los Derechos Humanos,
Dr. Julio Eduardo Arango Escobar,

Ante el actual estado de emergencia,

Manifiesta:

- Su solidaridad con el dolor de los guatemaltecos que han perdido sus seres queridos y con aquellas personas que fueron damnificadas por este fenómeno natural. Asimismo envía un mensaje de reconocimiento a los cuerpos de socorro, al pueblo en general y a la Comunidad Internacional por su valiosa ayuda en estos momentos de crisis.

- Que, investido de autoridad moral para velar por los derechos individuales y sociales de la población; y basado en los decretos 54-86 y 32-87 del Congreso de la República, se mantendrá vigilante ante cualquier anomalía que se pueda cometer con relación a la atención y ayuda que debe prestarse a las personas damnificadas en los lugares donde el fenómeno tropical devastó cultivos, viviendas y lamentablemente cobró la vida de muchos guatemaltecos.

- Hace un llamado a la iniciativa privada y a los empresarios para evitar la especulación y contribuir a la reconstrucción inmediata del país. En este sentido, informa a la población que giró instrucciones al personal de la sede central así como de las 22 auxiliaturas departamentales para que recojan las denuncias de la población contra aquellos que lucren con su dolor y necesidades en estos momentos difíciles.

- Envía un mensaje de solidaridad a los pueblos centroamericanos en estos momentos de crisis.

Finalmente, el Magistrado de Conciencia hace un llamado de reflexión al gobierno y a los políticos, a la iniciativa privada y al pueblo en general, que cuando sucede una catástrofe de esta naturaleza se desnuda la realidad guatemalteca de pobreza y marginalidad en que vive la mayoría de la población y se hacen manifiestas las prioridades sociales que deben ser resueltas.

Guatemala, noviembre de 1998.

Este documento es publicado en la internet por Derechos Human Rights