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11nov10
Juez no fijó lugar de reclusión
El juez penal de 10º Turno, Rolando Vomero, desmintió ayer haber tenido algún tipo de injerencia en la definición del lugar de reclusión del general Miguel Dalmao, como trascendió en las últimas horas. La definición del lugar de reclusión es preceptiva de la autoridad policial, dijo el magistrado.
"Ni dispuse, ni sugerí, ni recomendé nada sobre el lugar de reclusión de ambos oficiales. Los jueces nada disponemos sobre el lugar de reclusión de las personas, esas disposiciones son resorte exclusivo del Ministerio del Interior; el lugar de reclusión lo dispone la autoridad policial", afirmó tajantemente ayer Vomero en diálogo con LA REPUBLICA.
El magistrado desmintió de esta forma las declaraciones del subsecretario del Ministerio del Interior, Jorge Vázquez, en cuanto el general Dalmao y el coronel (r) José Nelson Chialanza fueron recluidos en la Guardia de Coraceros por "solicitud del juez y una resolución del Ministerio del Interior".
El magistrado dispuso el pasado lunes el procesamiento con prisión de Dalmao y Chialanza por el "homicidio muy especialmente agravado" de la militante de la UJC, Nibia Sabalsagaray, en las entrañas del Batallón de Transmisiones Nº 1 (hoy Batallón de Comunicaciones Nº 1), el 29 de junio de 1974.
El procesamiento de un general en actividad, hasta entonces jefe de la División de Ejército IV, con asiento en Minas (Lavalleja), sacudió la interna militar, principalmente en las altas esferas del Ejército Nacional, lo cual implicó el desarrolló de una reunión entre el comandante en jefe, general Jorge Rosales, y la totalidad de los generales en actividad. El encuentro contó con la participación, sobre el final, del ministro de Defensa Nacional, Luis Rosadilla.
Rosadilla escuchó las preguntas e inquietudes de la oficialidad, ante lo cual garantizó que "por ahora" el general Dalmao no será recluido en un centro de reclusión, sino que permanecerá detenido en la Guardia de Coraceros. Las palabras del ministro de Defensa fueron ratificadas, posteriormente en rueda de prensa, por el subsecretario del Ministerio del Interior, Jorge Vázquez.
El jerarca afirmó que "por razones particulares" Dalmao permanecería recluido en la Guardia de Coraceros. "El futuro no lo sabemos, pero por ahora, el destino de detención del general Dalmao es Coraceros", dijo Vázquez. El subsecretario de Estado fundamentó la decisión en una "solicitud del juez y una resolución del Ministerio del Interior", como informara ayer LA REPUBLICA.
Sin embargo, el juez Vomero desmintió haber influido de alguna manera sobre el lugar de reclusión del oficial. "No sé por qué se dijo eso ni quiero entrar en polémica, pero los jueces nada disponemos sobre el lugar de reclusión de las personas, esas disposiciones son resorte exclusivo del Ministerio del Interior. Es lo único que voy a decir", expresó Vomero a LA REPUBLICA.
Argumentos por Coraceros. Por su parte, el ministro del Interior, Eduardo Bonomi, aseguró ayer que la decisión de recluir al general Miguel Dalmao en la Guardia de Coraceros fue resuelta "en consulta" con el presidente de la República, José Mujica, por cuanto era el establecimiento con mejores condiciones para alojar al oficial. Las autoridades analizaron la situación y determinaron que Dalmao "no podía ir a una cárcel común porque es un general en actividad" y no podía ser recluido en la Unidad Penitenciaria Nº 8 ("Cárcel Especial para Militares") porque allí están alojados militares que pasaron a situación de retiro "antes" de la asunción del gobierno de Tabaré Vázquez. Asimismo, las autoridades descartaron alojarlo en Cárcel Central porque "se la identifica como un privilegio para los presos, aunque no sea así", expresó Bonomi en conferencia de prensa.
Por tanto, "creímos conveniente que fuera a cumplir la pena al cuartel de Coraceros donde también hay algún policía cumpliendo pena por determinación de la Justicia", dijo el secretario de Estado. Bonomi explicó que Dalmao está "en un dormitorio, no tengo claro su dimensión. Está en condiciones de reclusión", enfatizó. El oficial permanecerá en la Guardia de Coraceros "hasta que alguien disponga lo contrario, y no creo que se vaya a disponer lo contrario", concluyó Bonomi.
[Fuente: La República, Montevideo, 11nov10]
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