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DERECHOS


29nov01


Declaracion publica del PCCH ante el desalojo violento de su sede llevado a cabo por Carabineros.


Como ya es de conocimiento público, las fuerzas más oscuras de nuestro país, realizaron ayer una provocación contra el país entero, a través de un ataque a la Sede Central de nuestro Partido, para lo cual adujeron el burdo expediente de una resolución judicial que ordenaba desalojar ese local.

Un amplio espectro político, social y cultural de chilenos han repudiado con decisión esta maniobra profundamente antidemocrática. Queda de manifiesto el anhelo de lograr establecer una verdadera democracia en Chile. La antidemocracia no puede seguir actuando con tanta impunidad. En las primeras horas de la agresión, que significó varios heridos y 40 detenidos, incluyendo a Nuestra secretaria Gladys Marín, a cinco candidatos a parlamentarios y varios dirigentes del partido y la juventud comunista, contamos con la presencia de Pamela Pereira, Luis Pareto, Carmen Hertz, Carolina Tohá, numerosas personalidades de la cultura, de los derechos humanos, dirigentes sindicales y sociales. Destacamos la actitud solidaria y responsable de todos ellos y el repudio que han manifestado hacia la brutalidad con que se efectuó el desalojo.

Estamos ante hechos muy graves. Tanto el Ministerio del Interior, como el nuevo Director General de Carabineros han manifestado que no fueron informados por el Poder Judicial ni por Carabineros de la acción que se preparaba con un gran despliegue de fuerzas. Fueron entonces los llamados poderes fácticos, vale decir la ultraderecha fascista, los que siguen actuando al interior de Carabineros y de la Justicia, los que se imponen al Gobierno y a la nueva autoridad de Carabineros.

Nuestro partido valora la actitud del General Alberto Cienfuegos que concurrió personalmente a dar una explicación y su intención de ordenar de inmediato una investigación. También tiene en cuenta las medidas adoptadas por el Ministerio del Interior tendientes a reparar en parte el profundo daño causado a nuestro partido.

Sin embargo, es preciso declarar con serenidad y firmeza que hechos como los ocurridos no pueden darse en un régimen que se autoproclama democrático. No es posible aceptar que las máximas autoridades del Gobierno y la Policía no cuenten con información ni ejerzan control sobre sus aparatos de seguridad y represión. No es posible aceptar que un juzgado determine sin más el desalojo de la sede de un partido político, menos aún a escasos días de un importante elección parlamentaria, estando además en conocimiento, porque ha sido noticia durante años, que se trata de un local adquirido por el PC bajo la dictadura, ligado a sus detenidos desaparecidos y que le ha sido arrebatado mediante argucias "legales". No es posible que el Ministro del Interior no haya acogido de inmediato el llamado de la Presidenta de nuestro Partido cuando se estaba ante un atropello flagrante de derechos humanos con riesgo de vida para los militantes del partido.

Los comunistas hemos luchado siempre por los derechos de los trabajadores, somos una organización popular y por lo mismo defenderemos también nuestro legítimo derecho a la actuación política en Chile. Con nuestra compañera Gladys a la cabeza hemos defendido con dignidad este derecho ante la violencia inusitada de la fuerza represiva.

No cejaremos en la lucha por recuperar nuestro local.

Presentaremos todas las querellas y demandas que correspondan.

Pero lo más importante es que hoy reafirmamos nuestro compromiso con la lucha por la democracia en Chile. Continuaremos adelante con nuestro propósito de construir un sistema en el que nadie sea perseguido, ni reprimido por sustentar ideas diferentes al régimen imperante. Declaramos que ni este golpe ni los que puedan venir nos atemorizan. Llamamos al pueblo a seguir en esta lucha con confianza, es la hora de mirar el futuro sin temor.

Estamos seguros que otro Chile es posible.

Comité Central
Partido Comunista de Chile
Santiago, 29 de noviembre de 2001.

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Este documento ha sido publicado el 07dic01 por el Equipo Nizkor y Derechos Human Rights