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03feb08


Rusia concede la extradición a Colombia del mercenario Yair Klein


Aún no ha sido notificada la decisión, pero todo indica que el proceso se llevará a cabo en los próximos días, según fuentes del DAS.

Solo las diferencias de horario son las que no han permitido comunicación fluida de Interpol Colombia con Interpol Rusia para empezar el trámite del traslado.

A Klein le espera una condena de 10 años y 8 meses de prisión, ratificada en el 2001 por el Tribunal Superior de Manizales, por entrenamiento de grupos terroristas y concierto para delinquir.

El israelí podría brindar información clave de cómo empezó el paramilitarismo en Colombia en los años ochenta y de quiénes tuvieron la iniciativa de formar estos grupos, un proceso en el que podrían relacionarse ganaderos y militares de la época.

La condena también cubre a sus conciudadanos Melnik Ferry y Tzedaka Abraham.

Yair Gar Klein es un teniente coronel retirado del Ejército de Israel que inició su carrera militar hace 45 años. En 1962 se vincula al Ejército de Israel como voluntario de la unidad de paracaidistas. En 1968 se hace comandante de pelotón en la unidad regional de reconocimiento. En 1977 llega a su máximo cargo militar, como vicecomandante de Brigada en la línea de Choque. Después de eso acaba su servicio regular y queda en el servicio de la reserva.

El 1988 el entonces director del DAS denuncia que Klein es contratado por los narcotraficantes Pablo Escobar y Gonzalo Rodríguez Gacha, financiadores de las Autodefensas Unidas de Colombia (Auc) del Magdalena Medio.

A finales de los 90, Klein fue detenido en Sierra Leona, donde pagó una condena de 16 meses. Ese país no tuvo en cuenta la orden de captura de Interpol (que entonces estaba vigente) y permitió que Klein regresara a Israel.

El ex fiscal Alfonso Valdivieso, que fue embajador en Tel Aviv, recuerda que no hubo manera de que el Gobierno israelí entregara a Klein.

"Ellos tienen una legislación muy clara en cuanto a no extraditar nacionales. Por eso, si lo envían a Israel no habrá muchas posibilidades de que Colombia pueda hacer justicia con esta persona", dijo Valdivieso Sarmiento.

El nombre del mercenario israelí Yair Klein volvió a sonar el pasado 5 de marzo de 2007, cuando dio una entrevista al programa de televisión Hablando claro con la prensa, del Canal Caracol.

Allí dijo, entre otras cosas, que no tenía ningún proceso judicial pendiente en Colombia. Sin embargo, sobre él pesa una condena del Tribunal Superior de Manizales, que lo sentenció a 10 años y 8 meses de prisión, en el 2001.

Su salida en televisión alertó a las autoridades, y 23 días después su cara apareció en una circular roja de Interpol solicitando su búsqueda "para dar cumplimiento de una condena penal".

Klein es considerado como un 'pez gordo', pues se trata del hombre que organizó los ejércitos privados de Fidel y Carlos Castaño (fundadores de las Auc). Así mismo, ayudó a entrenar los grupos armados de Gonzalo Rodríguez Gacha (narcotraficante conocido como el 'Mexicano'), los cuales cometieron al menos 40 masacres entre 1987 y 1990.

De hecho, dos de sus 'alumnos aventajados' fueron responsables de dos crímenes que conmocionaron al país: Alonso de Jesús Baquero, el 'Negro Vladimir', condenado a 30 años por las matanzas de Urabá y el Magdalena Medio, y Eduardo Rueda Rocha, uno de los sindicados del crimen del candidato presidencial Luis Carlos Galán en la plaza de Soacha, en 1989. "(Su paso por el país) Fue un capítulo interesante en mi vida y espero que en alguna etapa logren realizar en Colombia lo que yo fui a hacer: acabar con la guerrilla", dijo Klein en el programa.

Al momento de ser emitida dicha entrevista, las autoridades creían que Klein estaba en Israel, en donde fue condenado, en 1991, a un año de prisión condicional y a pagar una multa de 75 mil dólares por sus delitos en Colombia.

Antecedentes del proceso de extradición

Desde el 1 de agosto del 2007, la Interpol en Rusia confirmó a Colombia que el mercenario israelí entró a ese país. Fue capturado el 27 de agosto en el aeropuerto de Domedédovo de Moscú, cuando abordaba vuelo a Tel Aviv.

Respondiendo a una circular roja (orden de captura) de marzo de 2007, la Policía rusa notificó a Bogotá que debía empezar a mover el aparato diplomático para proceder a una detención con fines de extradición.

Sin embargo, hasta ese momento, según un reporte reservado conocido por EL TIEMPO, ningún juez había formalizado el pedido para que lo capturaran y trajeran a Colombia.

Eso, a pesar de que han pasado seis años desde que el Tribunal Superior de Manizales confirmó la condena.

En marzo del 2007, tras una entrevista en la que Klein dijo que no tenía líos judiciales para salir de su país, el DAS reactivó la solicitud para que la Interpol lo detuviera.

En ese momento, por una situación que Andrés Peñate, el ex director del organismo, atribuyó en su momento a la falta de gestión del aparato judicial colombiano, Klein podía moverse sin problema por el mundo.

Lo cierto es que desde ese primero de agosto de 2007, el Gobierno colombiano trabajó a toda máquina con su equipo diplomático para lograr la captura del mercenario, quien estuvo a punto de caer en la capital rusa en dos oportunidades.

Klein, de acuerdo con la información que recibió la Interpol en Colombia, pasaba temporadas en sitios exclusivos de Rusia y en España.

Otro obstáculo en el proceso fue el idioma. Las autoridades rusas informaron que en ausencia de un tratado de extradición bilateral, Colombia debía enviar la traducción oficial de la sentencia. La Embajada en Moscú trabajó a marchas forzadas para cumplir con esa petición.

Como el plazo dado por los rusos se agotaba, el 6 de agosto y mediante nota verbal a Rusia, Colombia solicitó la captura provisional.

Así, el Gobierno colombiano ganó tiempo y comenzó a solucionar problemas que surgieron para la plena identificación del mercenario, quien en su pasaporte aparece con el nombre de Aiar Gal Klein, de 51 años, cuando en realidad tiene 64 años.

El 13 de agosto de 2007, el DAS en Bogotá por fin recibió la solicitud de captura del juzgado de Caldas y la envió a Rusia con más datos y fotos del hombre que por dos décadas le hizo el quite a la justicia colombiana.

En la última semana de agosto de 2007, las autoridades rusas por fin dieron el parte positivo: Klein fue detenido en el aeropuerto de Domedédovo, de Moscú, cuando abordaba un vuelo a Tel Aviv.

"Me dijeron que no opuso resistencia y fue conducido a un calabozo, sorprendido con la captura", dijo Peñate en su momento.

[Fuente: El Tiempo, Bogotá, Col, 03feb08]

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