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10ago11


E.On recortará hasta 11.000 empleos tras perder 1.576 millones en julio


Primeras consecuencias negativas del apagón nuclear aprobado por la canciller Angela Merkel, tras el desastre de Fukushima: E.ON estudia despedir al 13% de su plantilla. Es decir, 11.000 de los 85.000 trabajadores que la componen, con el objetivo de reducir "significativamente" sus costes tras registrar pérdidas de 1.576 millones de euros en el segundo trimestre

La mayor compañía energética de Alemania advirtió de que las dificultades observadas hasta junio persistirán en los próximos años, lo que continuará lastrando sus resultados, por lo que pretende "reducir significativamente sus costes" hasta unos 9.500 millones anuales en 2015, frente a los 11.000 millones actuales.

La compañía confirma las informaciones difundidas por los medios en los últimos días, aunque la empresa concretará en las próximas semanas el plan.

La plantilla de E.ON se reparte entre Alemania y otros 12 países de Europa -entre ellos España-, así como de América del Norte.

El pasado fin de semana, el diario 'Süddeutsche Zeitung' avanzó que la compañía planeaba despedir a unos 10.000 empleados en todo el mundo, a raíz del apagón nuclear aprobado en junio por el Bundestag (Parlamento).

Ello implicará el cierre de los 17 reactores atómicos de Alemania en los próximos diez años y la apuesta por las energías renovables.

E.ON, con base en Düsseldorf (oeste de Alemania), gestiona cinco de esas plantas nucleares en solitario y otras seis en régimen compartido con otros consorcios energéticos.

"En los últimos años y a pesar de numerosos esfuerzos no hemos logrado simplificar nuestras estructuras administrativas (...) No podemos permitirnos, no sólo, pero particularmente en Alemania, ningún nivel innecesario de gestión, ni duplicar procesos o trabajos", señaló el consejero delegado de E.On, Johannes Teyssen.

Recorte de previsiones y del dividendo

En los seis primeros meses del ejercicio E.On obtuvo un beneficio atribuido de 691 millones de euros, un 82,3% menos que en el mismo periodo de 2010, después de que en el segundo trimestre perdiera 1.576 millones, lastrado por la nueva política energética alemana, que ha adelantado el 'apagón' nuclear e impone un impuesto a esta fuente de energía.

La cifra de negocio de la 'utility' alcanzó los 53.048 millones entre nero y junio, un 20% más, tras elevar un 19% las ventas de electricidad y mejorar un 14% las de gas.

"En vista de la intervención política y la extremadamente difícil situación económica, E.On se ha visto forzada a reducir significativamente sus expectativas para 2011", indicó la empresa, que ahora espera un Ebitda ajustado de entre 9.100 y 9.800 millones y un beneficio neto ajustado de entre 2.100 y 2.600 millones de euros.

De este modo, E.On ha recortado el importe del dividendo previsto para este ejercicio, hasta 1 euro, frente a los 1,30 euros previstos.

[Fuente: El Mundo, EFE y EP, Madrid, 10ago11]

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