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27feb06


Ofensiva diplomática española para defender los intereses de Repsol en Bolivia.


El Gobierno español ha puesto en marcha su ofensiva diplomática para proteger los intereses de Repsol YPF, después de que un fiscal de Bolivia decretara orden de busca y captura para el presidente de la filial de la petrolera hispanoargentina, Julio Gavito. El máximo responsable de la petrolera, Antoni Brufau, tenía en agenda acudir el viernes próximo a Bolivia para negociar las inversiones de la empresa en el país con el jefe del Ejecutivo, Evo Morales, y previamente iba a preparar el encuentro con Gavito, lo que motivó su viaje a España y la inmediata orden de captura fijada por el juez, apelando a las acusaciones de contrabando existentes contra Gavito y Andina, la filial de Repsol en Bolivia.

El embajador de España en Bolivia, Francisco Montalván, se había entrevistado ya el sábado con el presidente del país, Evo Morales, para manifestarle la preocupación del Gobierno español por la orden de caputura contra el presidente de la filial boliviana de Repsol. Según fuentes diplomáticas españolas, Morales transmitió al embajador su sorpresa por la actuación judicial. Previamente, los Ministerios de Obras Públicas y de Planificación habían trasladado a Montalván el mismo mensaje de sorpresa y preocupación por una noticia que aseguraron desconocer oficialmente.

El líder boliviano declaró al embajador su mayor interés en tener excelentes relaciones con España y en solucionar los problemas con la petrolera filial de Repsol. Asimismo, dijo que existe la voluntad del mandatario de mantener las relaciones con España al más alto nivel y también con Repsol en el interés de negociar para llegar a un acuerdo sobre las nuevas condiciones de trabajo en el país.

En vísperas de la cita Brufau-Morales.

Julio Gavito, el presidente de la empresa Andina, habiá viajado el viernes pasado a España para preparar la próxima visita del presidente de Repsol-YPF, Antoni Brufau, que está programada para el este viernes. La intención era poner al día a Brufau con vistas a las negociaciones con el Ejecutivo de Morales. A su salida del país, la Fiscalía boliviana de Santa Cruz dictó de inmediato una orden de aprehensión contra Gavito, a pesar de la solicitud de los abogados de Andina para que se aplazara la comparecencia del Ejecutivo debido, precisamente, a su viaje programado a España.

Andina es una empresa formada en un 50% por el consorcio hispano argentino Repsol-YPF y en un porcentaje igual por el Estado boliviano, representado por las dos administradoras de fondos de pensiones existentes en el país. La Fiscalía de la ciudad de Santa Cruz es la encargada de investigar una denuncia de la Aduana boliviana por un presunto contrabando de unos 230.000 barriles de crudo por valor de unos 7,7 millones de euros, así como la supuesta falsificación de documentos aduaneros.

Andina ha negado la acusación de contrabando de petróleo y ha informado de que pudo tratarse de un error administrativo que no supone una violación de la legislación nacional en materia energética. En la Policía Técnica Judicial de Santa Cruz se indicó que, además de Gavito, también se ha dictado orden de aprehensión contra Américo Díaz y Fernando Cabrera, funcionarios de menor jerarquía de la petrolera Andina.

Brufau llamó a Moratinos.

El propio Brufau telefoneó el sábado por la noche al ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, Miguel Ángel Moratinos, a Doha (capital de Qatar) para expresarle su preocupación por las noticias provenientes del país andino. El jefe de la Diplomacia española le contó las gestiones que la Embajada española está haciendo en La Paz sobre este caso y que la decisión del fiscal parece fruto de un afán de protagonismo de este último.

Fuentes de la petrolera que preside Antoni Brufau aseguran que Andina cumplió con la legalidad vigente en las exportaciones de crudo realizadas en Bolivia entre 2004 y 2005, con el pago de los impuestos y la presentación de los documentos correspondientes. La petrolera insiste en su vocación de permanencia en el país y su voluntad de cooperar con el Gobierno. Repsol reconoce que existe "bastante confusión" sobre la decisión del fiscal y espera que "se aclare el malentendido que puede estar "produciéndose" al respecto, por lo que confía en mantener la "línea de diálogo abierta con las autoridades bolivianas".

Se trata del segundo revés para Repsol YPF desde que el pasado 21 de enero Evo Morales asumió el poder en el país andino. Previamente, el Ministerio de Hidrocarburos había inscrito a nombre del Estado boliviano las reservas que la petrolera tenía establecidas bajo su propiedad en varias bolsas internacionales. La decisión provocó un sensible ajuste a la baja de las reservas probadas de gas de la compañía, y un posterior impacto en su cotización bursátil.

El gran proyecto iraní

Por otra parte, Repsol ha resultado seleccionada, junto a la petrolera francobelga Total y la angloholandesa Shell, para llevar a cabo el desarrollo del campo de gas iraní de Sur de Pars, según informó ayer la televisión pública del país. El proyecto, situado en el golfo Pérsico, puede convertirse en el mayor campo de gas del mundo y prevé la construcción de un gasoducto hasta la India que pasaría por territorio pakistaní.

Según la cadena iraní, Total se encargará del desarrollo de la fase 11, mientras que Shell y Repsol se responsabilizarán de la fase 13 del campo de Pars del Sur. El valor del acuerdo para el desarrollo de la fase 11 podría llegar hasta los 1.400 millones de dólares (unos 1.180 milones de euros), mientras que el de la fase 13 se calcula en 1.500 millones (cerca de 1.260 millones de euros).

[Fuente: Estrella Digital, Madrid, Esp, 27feb06]

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