Información
Equipo Nizkor
        Tienda | Donaciones online
Derechos | Equipo Nizkor       

20ene21


Trump abandona la Casa Blanca y da comienzo al relevo en la presidencia de los Estados Unidos


El presidente saliente de Estados Unidos, Donald Trump, ha abandonado este miércoles la Casa Blanca, unas cuatro horas antes de la investidura de Joe Biden como nuevo mandatario del país, para trasladarse rumbo al estado de Florida, lugar en el que vivirá a partir de ahora. En una imagen muy atípica respecto a otros presidentes del país, Trump ha dejado la que ha sido su residencia durante los últimos cuatro años junto a Melania, con la que iba cogida de la mano, en helicóptero y en medio de una gran expectación para dirigirse a la Base de la Fuerza Aérea Andrews. Allí ha llegado a ritmo de 'Gloria' para protagonizar una breve ceremonia a la que ha acudido su entorno más cercano, como su hija Ivanka, antes de volar hacia Florida a bordo del Air Force One.

Por su parte, Biden ha pasado la noche en la Blair House, la residencia oficial para invitados en Washington. La jornada del próximo mandatario del país ha arrancado con una misa a la que ha acudido también su vicepresidenta, Kamala Harris, antes de que el grupo se desplace hasta la sede del Congreso norteamericano.

A diferencia de otras tomas de posesión, Trump ya había anunciando que no asistiría a la de su sucesor y tampoco planea mantener ningún encuentro con él, después de haber denunciado fraude en reiteradas ocasiones a raíz de su derrota, sin presentar pruebas.

Pese a ello, el presidente saliente aseguró el martes en un vídeo que "reza" porque el Ejecutivo de Biden tenga "éxito" para "mantener a Estados Unidos segura y próspera", al tiempo que rechazó el ataque al Capitolio llevado a cabo por decenas de sus partidarios el 6 de enero.

"Todos los estadounidenses se quedaron horrorizados por el asalto a nuestro Capitolio. La violencia política es un ataque contra todo lo que apreciamos como estadounidenses. Nunca puede ser tolerado", indicó Trump.

Además, elogió el trabajo que él mismo y su Administración han hecho durante cuatro años. "Conforme concluyo mi mandato como el 45º presidente de Estados Unidos, me presento ante ustedes orgulloso de verdad de lo que hemos conseguido juntos. Hemos hecho lo que vinimos a hacer y mucho más", aseguró durante su alocución, en la que apareció rodeado de cuatro banderas del país.

Trump, que prometió una transición "ordenada", será sometido a un segundo 'impeachment' -el primer presidente en la historia del país en ser sometido a dos procesos de destitución- por "incitar a la insurrección".

Antes de irse, ha indultado al que fuera su asesor político y jefe de campaña Steve Bannon, acusado en agosto del año pasado de conspiración para cometer fraude y blanqueo de dinero en el marco de un proyecto de recaudación de fondos para la construcción del muro en la frontera con México.

Además de Bannon, entre los perdonados están los raperos Lil Wayne y Kodak Black, el antiguo director financiero de la Organización Trump, Elliott Broidy, y el exalcalde de Detroit Kwame Kilpatrick, quien en 2008 se declaró culpable de obstrucción a la justicia como parte de un acuerdo de culpabilidad en una investigación en la que él y su padre habían aceptado sobornos a cambio de contratos públicos.

La ceremonia de Biden

Por su parte, Biden llegó este martes a Washington para tomar el miércoles las riendas de un país abrumado por una convergencia de crisis derivadas de la pandemia y las divisiones políticas, que confía en afrontar con una rotunda llamada a la unidad.

Horas antes de convertirse en el presidente número 46 de la historia de Estados Unidos, Biden abandonó emocionado el estado donde lanzó su carrera política, Delaware, y viajó a Washington para reunirse con la que será la primera mujer vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris.

Ambos participaron juntos en su primer acto en Washington antes de la investidura de este miércoles: una ceremonia de homenaje a las víctimas de la pandemia en Estados Unidos, donde unas horas antes se había alcanzado el sombrío récord de 400.000 muertes por COVID-19.

"Para sanar tenemos que recordar, y es difícil a veces recordar, pero (...) es importante hacer eso como país", dijo Biden en una breve y solemne ceremonia frente al monumento a Lincoln, uno de los más icónicos de la capital.

La ceremonia sentó el tono para la atípica jornada de investidura, constreñida tanto por las limitaciones derivadas de la pandemia como por los temores a nuevos incidentes violentos tras el asalto al Capitolio.

Las calles del centro de Washington, normalmente repletas antes de cualquier investidura, están cercadas por altas vallas y cerradas al tráfico y al paso de los viandantes, bajo la atenta mirada de hasta 25.000 militares de la Guardia Nacional, cinco veces más que los que hay en Irak y Afganistán. De ese número, una docena de soldados han sido retirados tras una investigación del FBI, dos de ellos por supuestos vínculos con organizaciones de extrema derecha.

Además de ese despliegue de seguridad sin precedentes para una investidura presidencial, la jornada de este miércoles contrastará con otras por la ausencia de público en el National Mall, la enorme explanada que se extiende desde el Capitolio hasta el monumento a Lincoln.

Para representar a los estadounidenses que, de no haber sido por la pandemia, se habrían desplazado a Washington para ver la investidura, los organizadores han dispuesto a lo largo de esa explanada 191.500 banderas de diferentes tamaños y tipos, iluminadas por 56 pilares de luz que representan a los estados y territorios del país.

[Fuente: República de las ideas, Madrid, 20ene21]

Bookshop Donate Radio Nizkor

United States
small logoThis document has been published on 17Feb17Feb21 by the Equipo Nizkor and Derechos Human Rights. In accordance with Title 17 U.S.C. Section 107, this material is distributed without profit to those who have expressed a prior interest in receiving the included information for research and educational purposes.