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05sep11


Prisa reserva 80 millones para cubrir el agujero de su filial de impresión


La elevada deuda que mantiene con los bancos y sus cuitas fiscales no son los únicos agujeros que tiene que afrontar el Grupo Prisa. Según admite la propia compañía en una información remitida a la CNMV, se ha visto obligada a reservar 80 millones de euros para cubrir los riesgos que le genera Dédalo Grupo Gráfico, empresa dedicada a la impresión y de la que el grupo de medios atesora un 40%. La cuestión no es baladí y viene de lejos. La auditora cuestionaba en su último informe la viabilidad de la empresa y la compañía de los Polanco ya se vio obligada a garantizar un crédito sindicado suscrito por la sociedad por valor de 130 millones de euros.

“Dédalo Grupo Gráfico opera en todos los sectores de impresión, huecograbado, offset y prensa, y en los últimos años ha sufrido en todos ellos el impacto de la crisis económica, la competencia de precios y la competencia geográfica -admite Prisa al regulador-. Por todo lo expuesto anteriormente, el Grupo Prisa ha decidido registrar una provisión de 80 millones de euros que pueda cubrir eventualmente los riesgos derivados de la evolución del negocio descrita y de la situación particular del Grupo Dédalo”. El otro 60% de la empresa está en manos de sociedades vinculadas al Grupo Ibersuizas, que se ha blindado ante una eventual quiebra de la sociedad.

Y es que como admite el grupo de medios, en el ejercicio de 2010 firmó un “contrato de opción recíproca de compra y venta de participaciones sociales”, según el cual “los actuales accionistas mayoritarios podrán ejercer su opción de venta en el caso de que alguna de las sociedades de Dédalo fuera declarada en situación legal de concurso de acreedores”. El precio para ejercitar la opción es simbólico: apenas un euro. Por si fuera poco, Prisa ha tenido que provisionar también el importe de los créditos concedidos a su filial de impresión y que a 31 de diciembre de 2010 alcanzaban los 92,6 millones de euros.

Deloitte ya cuestionaba abiertamente el futuro de la firma en su análisis de las últimas cuentas presentadas por Dédalo, correspondientes al año 2009. En primer lugar, advertía que las pérdidas de los últimos ejercicios hacían que el patrimonio neto consolidado y el fondo de maniobra del grupo fueran negativos. Una situación que, advierte el informe, “es causa de disolución, salvo que el capital social se aumente o se reduzca en la medida suficiente. Con este fin, el Grupo tiene registrados préstamos participativos por importe de 34.409 miles de euros y se obtuvo nueva financiación sindicada”.

En segundo término, reflexiona sobre las posibilidades del negocio a medio plazo y establece que la viabilidad futura del grupo está vinculada “a la mejora de los mercados en los que opera y al éxito de decisiones futuras de los administradores, no siendo posible anticipar a la fecha de este informe el efecto del desenlace de este conjunto de circunstancias y actuaciones en las cuentas anuales consolidadas conjuntas”.

La competencia de China o India

Un escenario que no parece haber mejorado. En la nota remitida a la CNMV hace apenas semanas, se asegura que “uno de los medios más afectados mundialmente por la transformación económica, etc. es el medio de la prensa escrita y todos los negocios que giran en torno a ella, fundamentalmente la impresión y la distribución”. En este sentido, Prisa admite caídas importantes de ingresos en todas esas divisiones, también por “la competencia en precios llevada a cabo por economías como la china o la india”. También se añade que en los últimos años se ha producido una reducción paulatina de las empresas que operan en los mercados de impresión y distribución.

Como publicaba este periódico, también tiene abierto un importante frente en el ámbito fiscal. Y es el Ministerio de Hacienda ha incoado actas a la compañía por importe de 67,2 millones de euros al discrepar del criterio utilizado por la firma de los Polanco al utilizar determinadas deducciones del Impuesto de Sociedades, sobre todo la que aplica por actividad exportadora. También por su tributación del IVA. La empresa apenas ha reservado 8,4 millones de euros para cubrir el desfase, ya que no considera que se “materialice en pasivos significativos”. La deuda total del Grupo Prisa ronda aún los 3.200 millones de euros, pese a las desinversiones acometidas en el pasado ejercicio.

[Fuente: Por D. Toledo, El Confidencial, Madrid, 05sep11]

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